Switch Mode

El Amor Desaparecido 16

El Amor Desaparecido 16

Capítulo 16 

Bajo un cielo tachonado de estrellas, Jorge estaba acurrucado en silencio sobre un banco de piedra bañado por la luz de la luna

Apoyó su antebrazo en las rodillas de Alejandra, pero sus ojosno podían despegarse de su 

rostro

La luna se deslizaba como escarcha sobre su piel suave, tersa como jade blanco. Incluso en la oscuridad, ella brillaba

No fue hasta que la pomada tocó la quemadura que Jorge soltó un quejido ahogado, volviendo por fin en

-La quemadura es bastante seria. Si no te la cuidas bien, te va a quedar una cicatriz. ¿no eras estudiante de medicina? ¿Cómo se te ocurre ser tan descuidado

-No pasa nada, soy un hombre, ¿a quién le importa una cicatriz en el brazo

-A me importa. —dijo Alejandra con un suspiro

Esa simple frase lo dejó sin palabras, completamente atónito

Una vez que terminó de aplicarle el ungüento, Alejandra lo miró con seriedad, -Jor, mañana regresa a tu universidad. Yo entiendo lo que sientes por , pero ahora no tengo tiempo para pensar en el amor. Y no quiero que tú desperdicies tu juventud por quedarte aquí por

Jorge abrió la boca, a punto de responder, pero ella se le adelantó

-El próximo año, cuando el Instituto haga la convocatoria nacional, entra en el top cincuenta. Yo te voy a esperar

Por supuesto que ella sabía lo que él sentía. Y también sabía que, en el fondo, ella no lo rechazaba. Pero no podía permitir que él se dejara llevar por el enamoramiento y echara a perder su futuro

Con ese compromiso claro, Jorge aceptó finalmente regresar a la escuela al día siguiente

A la mañana siguiente, Alejandra lo acompañó hasta el aeropuerto

-Ale¿puedo abrazarte

Preguntó él, dándose la vuelta justo antes de abordar, con la esperanza brillando en sus ojos

Cuando vio que ella asentía, Jorge no dudó: fue directo hacia ella y la abrazó con fuerza, como si no quisiera soltarla nunca, -Ale, déjame cuidarteQuiero ser alguien en quien puedas confiar. -susurró contra su oído

2/3 

Sus palabras la dejaron momentáneamente sin aire. Luego, Alejandra escondió el rostro en su pecho y, apenas audible, asintió con suavidad

Pasaron largos segundos antes de que Jorge, a regañadientes, la soltara. Incluso cuando el avión ya se elevaba entre las nubes, el eco de sus latidos aún parecía vibrar en los oídos de Alejandra

Cuando los brotes de magnolia asomaban al llegar la primavera, el proyecto de desarrollo del nuevo medicamento alcanzó un avance crucial

Aún flotaba el calor de los brindis en la cena de celebración cuando Alejandra, saliendo del edificio de laboratorios, se quedó paralizada en seco. Ahí, bajo el frío persistente de comienzos de primavera, Ramón la esperaba. Vestía un abrigo gris desteñido, y su silueta, como un viejo ciprés reseco, parecía perder la batalla contra el viento

Había pasado un año desde la última vez que se vieron. Ramón estaba visiblemente más demacrado. Y en cuanto sus ojos apagados captaron a Alejandra, una chispa de vida pareció prenderse en su interior, -AAle-balbuceó, temblando de emoción

Pero esas dos letras apenas salieron de 

su boca, cuando el paso atrás de ella congeló el 

momento como un bloque de hielo, -No me toques

Su voz fue tajante.La mano que Ramón extendía quedó suspendida en el aire, bloqueada por un muro invisible de cristal

Su corazón se quebró al instante. Negaba con la cabeza una y otra vez, mordiendo con fuerza su labio inferior, mientras las lágrimas le nublaban la vista, -¿Me odias tanto

-Yoyo no vine a molestarte, de verdadsolo quería verte, ¿podemos hablar un momento? Solo un poco… 

Quería decirle cuánto la había echado de menos

Quería contarle que cada día sin ella fue una tortura

Quería abrirse el pecho y mostrarle las espinas del arrepentimiento que habían crecido salvajes 

dentro de él, destrozando sus entrañas

Pero al toparse con los ojos negros de Alejandra, tan fríos y distantes, cada palabra que tenía en la garganta se convirtió en silencio

Las hojas nuevas del ginkgo flotaban entre ellos, cayendo una tras otra, como si los separara una nevada que nunca logró derretirse en diez años

-Vuelve a tu camino

-No quiero verte más

Capitulo 16 

Alejandra se giró

-¡No te vayas! -gritó Ramón, tratando inútilmente de atraparla con la mano extendida

Solo alcanzó el viento helado que le perforó los dedos

Un guardia se acercó, erguido y firme como una piedra, impidiendo que él cruzara. Entre lágrimas, Ramón vio cómo la silueta de Alejandra se desvanecía entre sombras, como los últimos granos de arena que se escapan entre los dedos

Después de más de trescientos días y noches, al fin había logrado encontrarla

Y, una vez másla había perdido

¡Actúa rápido: el tiempo de bonificación gratuita se agota

El Amor Desaparecido

El Amor Desaparecido

Score 9.9
Status: Ongoing Type:
El Amor Desaparecido

Comment

Leave a Reply

Your email address will not be published. Required fields are marked *

Options

not work with dark mode
Reset